Aunque al menos 91 municipios de Jalisco iniciaron la actual temporada de estiaje con sequía moderada, el almacenamiento de agua en las presas ubicadas en el Estado presenta mejores niveles que el año pasado.
Para la Zona Metropolitana de Guadalajara, la presa Calderón está a un 70% de su capacidad; hace un año tenía nivel de 16%, lo que según las autoridades estatales provocó los tandeos y la escasez del líquido que padecieron decenas de colonias en la ciudad.
El Lago de Chapala está al 67% de su capacidad, en estas mismas fechas hace un año estaba a 54%, según los registros del Sistema de Monitoreo de las Principales Presas de México de la Comisión Nacional del Agua (Conagua).
El investigador Arturo Gleason Espíndola, jefe de Laboratorio de Tecnologías para la Arquitectura y Urbanismo Sustentables de la Universidad de Guadalajara, cuestionó las políticas de gestión del agua y la apuesta a sistemas de presas como solución, sin hacer un abordaje completo del ciclo del agua.
“La política pública del agua ha sido miope, no tienen una visión amplia de entender cómo funciona el agua; no es hacer una presa y traer agua. Tiene que buscarse una solución integral, no hay una solución mágica, una presa no resuelve el problema. Hay que entender el ciclo del agua, aprovechar el agua de lluvia, tratar las aguas y trabajar en la recuperación de acuíferos”, explicó
En la zona norte del Estado, la presa Vaqueros ubicada en Huejúcar reportaba en marzo del año pasado sólo 26% de su capacidad de almacenaje, mientras que en el informe actual registra un 77%. En el municipio de Santa María de los Ángeles el embalse Boquilla de Zaragoza tenía 30% al comienzo de la primavera del 2021 y en el último reporte de Conagua figura con 87%.
Para la región de Los Altos, la Comisión Nacional del Agua reportó que la presa La Sauceda en Lagos de Moreno, que hace un año estaba a un 31%, actualmente cuenta con 97% de almacenamiento.