El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, criticó la separación de padres e hijos inmigrantes indocumentados detenidos en la frontera, y aseguró que la práctica responde a una ley aprobada por los demócratas y quienes podrían cambiarla de inmediato.
“Los demócratas impusieron esa ley sobre nuestra nación, la odio. Odio ver la separación de padres y niños”, dijo el mandatario, sugiriendo que pese a sus poderes ejecutivos, no hay nada que pueda hacer en este caso.
En un imprevisto intercambio con periodistas en los jardines de la Casa Blanca, después ofrecer una entrevista al conservador canal noticioso Fox, Trump eximió a su administración de toda responsabilidad sobre esta práctica, que ha sido denunciada por líderes religiosos de su base electoral.
“Se necesitan 60 votos. Necesitamos un voto, se necesitan 60. Necesitamos 10 votos, no podemos obtenerlos de los demócratas. No se puede hacer a través de una orden ejecutiva”, aseguró entre los atropellados cuestionamientos de los periodistas.
Trump aludió el hecho de que en el Senado se requieren 60 votos para aprobar cualquier iniciativa de ley, y los republicanos controlan 51 de los 100 escaños, aún cuando en este caso la separación responde a una directiva y no a una ley.
Dejó en claro que cualquier cambio al respecto deberá resultar de que los demócratas acepten sus propuestas en el frente migratorio, y reveló que existen conversaciones entre ambos bandos.
“Es la ley, y eso es lo que los demócratas nos dieron. Estamos dispuestos a cambiarlo hoy mismo, si ellos quieren negociar, pero no quieren negociar. Ellos tienen miedo de la seguridad de nuestro país”, dijo a la televisora.
Sin embargo, Trump dijo a los reporteros que su administración mantiene conversaciones con los demócratas, insistiendo que cualquier acuerdo deberá incluir la aprobación de fondos para construir el muro y eliminar la política que permite poner en libertad a inmigrantes detenidos en la frontera, en espera de que comparezcan ante un juez de migración.
De acuerdo con cifras del Departamento de Salud, hasta mayo pasado existían casi 11 mil niños bajo custodia de las autoridades federales en centros de detención a través del país.
El mandatario acusó que el tema de la separación está siendo utilizado por los demócratas con fines políticos de cara a las elecciones legislativas de noviembre próximo.
Bajo las leyes actuales, toda persona detenida cruzando la frontera sin documentos debe ser sometida a una persecución judicial, y sólo entonces la separación de padres de familia y sus hijos ocurre, pero no de manera inmediata como está sucediendo ahora bajo esta nueva directiva.