Grupos conservadores mexicanos protestan con rezos frente a la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), que este lunes debate un histórico proyecto que considera inconstitucional la penalización del aborto en la primera etapa del embarazo.
Con pañuelos celeste con la leyenda “salvemos las dos vidas”, imágenes religiosas y rosarios, los manifestantes pidieron a la Suprema Corte que no avale ese fallo ni otro que puede declarar inconstitucional las legislaciones de los estados que reconocen la vida humana “desde la concepción”.
“Estamos exhortando a todos los ministros de la Suprema Corte de Justicia a que rechacen estos dictámenes, esos proyectos que están planteando, que no tienen ni pies ni cabeza. Confiamos en que estos ministros van a defender la vida”, declaró Leticia Gonzalez-Luna, presidenta de Voz Publica A.C.
El pleno de la SCJN tiene previsto discutir este lunes al mediodía el proyecto judicial más trascendental hasta ahora sobre el aborto, que solo está despenalizado en cuatro de los 32 estados del país: Ciudad de México, Oaxaca, Hidalgo y Veracruz.
El proyecto, derivado de una impugnación que la extinta Procuraduría General de la República (PGR) hizo contra el Código Penal de Coahuila en 2017, pretende declarar inconstitucional la criminalización de las mujeres que abortan y la del personal sanitario que la asiste con consentimiento.
“El vicio de inconstitucionalidad se traduce en que la disposición califica el actuar de la mujer como un crimen, con las consecuencias inherentes a tal configuración legislativa. Esto contribuye negativamente al pleno despliegue del derecho a elegir”, propone el proyecto del ministro Luis María Aguilar.
La decisión del Supremo sólo invalidaría el código penal del estado en cuestión, el norteño Coahuila, pero si ocho de los 11 ministros del pleno votan por el proyecto, se sentaría un precedente que obligaría a los jueces del resto de los estados a fallar a favor de las mujeres.
Por ello, los grupos que están en contra del aborto temen de sus posibles implicaciones.
“No es justo que la Suprema Corte empiece a legislar porque esto presiona de cierta manera a otras legislaciones a que también imiten estos casos”, contó Jorge Vera, integrante del movimiento “40 Días por la Vida”.
La Suprema Corte ya había resuelto una controversia constitucional en 2008, cuando declaró constitucional la despenalización del aborto en la capital del país, el entonces Distrito Federal.
Y apenas en julio pasado, por unanimidad, resolvió la Primera Sala declaró inconstitucional penalizar a mujeres víctimas de violación que deciden abortar después de los primeros 90 días de embarazo.
Según la agenda del día, el Supremo también planea declarar inconstitucional la reforma a la Constitución de Sinaloa, en el noroeste, que considera que “la vida comienza en la concepción”.
El órgano judicial considera que “concepción” no es un término jurídico y ha alertado sobre las implicaciones de otorgarle derechos de ciudadanos a los fetos.