Brasil, con 20 millones de casos de COVID-19, alcanzó este jueves las 560 mil muertes por la enfermedad, en momentos en los que la curva epidemiológica se sigue desacelerando ante el avance de la vacunación en el país, uno de los más golpeados del mundo por la pandemia.
Según el Consejo Nacional de las Secretarías de Salud (Conass), el gigante latinoamericano, con 212 millones de habitantes, contabilizó en las últimas 24 horas mil 099 muertes y 40 mil 054 casos de coronavirus.
De esa forma, el total de decesos llegó a 560 mil 706, mientras que el de contagios a 20 millones 066 mil 587.
El promedio de muertes en la última semana volvió a caer este jueves hasta 887 diarias, su menor nivel en casi siete meses y tras haber alcanzado el pico el pasado 12 de abril, cuando se registró un promedio de más de tres mil fallecidos diarios.
La media de contagios en la última semana, por su parte, bajó hasta los 32 mil 460 diarios, su menor nivel en ocho meses y lejos del máximo alcanzado el 23 de junio (77 mil 328).
La caída del número de casos y muertes en las últimas semanas coincide con la aceleración del proceso de vacunación en Brasil, donde, tras el retraso inicial, alrededor del 50 % de la población ha sido ya vacunada con al menos una dosis del inmunizante.
No obstante, tan sólo el 21 % de los brasileños cuenta ya con el esquema completo.
