* Lucen instalaciones de un nacimiento de tamaño natural, escena de peregrinos recreada en barro policromado y un árbol de navidad de 4 metros de altura confeccionado en papel maché.
TIJUANA, B.C (SBC).- Con la instalación de los símbolos más visibles de esta temporada, las tradiciones decembrinas tienen un lugar en el Centro Cultural Tijuana, organismo de la Secretaría de Cultura federal, donde se encuentran representadas en distintos espacios de la institución.
A tono con las celebraciones de esta época del año, el CECUT colocó la escena del legendario nacimiento con figuras de tamaño natural y todos los elementos que, según consagra la tradición, rodearon el alumbramiento de un niño al que creencias muy antiguas entre los pueblos del Medio Oriente le atribuían ser el Mesías.
El nacimiento monumental luce en el vestíbulo del Museo de las Californias y fue elaborado por el equipo de Museografía de la Subdirección de Exposiciones del CECUT, que decoró la totalidad del espacio en donde se encuentra la mítica escena al que por el momento solo le falta el recién nacido.
Por tratarse de creencias fuertemente arraigadas en las tradiciones populares presentes en las celebraciones decembrinas, resulta imposible separar su contenido del sentido religioso al que están asociadas.
“Mediante la palabra, los primeros cristianos conocieron el misterio que relataba el nacimiento de Jesús, en Belén de Judea. El hecho tuvo tal importancia en el cristianismo que se cristalizó en formas visuales que representaban la venida al mundo de un niño, el esperado Mesías, recostado en un humilde pesebre y acompañado de sus padres”, consigna Graciela Romandía de Cantú en la ficha técnica de la pieza.
“Todas las artes, a través de los siglos, lo han celebrado con memorables obras de alegría, belleza y fiesta que han llegado a nuestros días”, precisa la ficha. “Y se originaron tradiciones familiares que, aunadas a costumbres de otros países, conforman hoy la celebración navideña en México”.
Añade que “la tradición atribuye a Francisco de Asis el haber representado la escena de la natividad en una gruta en Greccio, pequeño poblado cerca de Rieti (Italia), donde ejercía su apostolado”; en ese lugar hacia 1223 “arregló un sencillo pesebre, incluyó un asno y un buey, y llamó a los aldeanos para que participaran en la escena”, elementos que están presentes en el nacimiento monumental del CECUT, junto con las figuras de los reyes de Oriente que, de acuerdo con la tradición, acudieron a conocer al niño del pesebre de Belén.
Asimismo, como parte de las tradiciones decembrinas, se exhibe como pieza del mes una representación de los Peregrinos en figuras de barro moldeado y policromado de Tlaquepaque, Jalisco, perteneciente a la colección de arte popular de la institución.
La composición presenta a María montada en el asno y José acompañándola de pie guiados por la estrella de Belén mientras se dirigen en busca de posada ante la inminente llegada del niño Jesús, según dicta la tradición. El conjunto es acompañado por la letra de una letanía que entonaban los peregrinos en tiempo de Posadas, reproduciendo la mítica escena bíblica.
Esta pieza del mes puede ser admirada en el costado poniente del edificio principal del CECUT al pie de la escalera que conduce a la Sala Carlos Monsiváis.
Completa las instalaciones de temporada un árbol de 4 metros de altura confeccionado en papel maché por las artistas Lula Lewis, Marisol González y Nuri Segura San Román, el cual luce majestuoso en el vestíbulo de El Cubo.
El árbol se encuentra adornado con juguetes populares mexicanos, como baleros, trompos, pirinolas, muñecas, luchadores enmascarados y esferas, todos confeccionados igualmente en papel maché, que representa una tradición artesanal de larga data en México.
Con tales instalaciones, el CECUT celebra las tradiciones populares asociadas a esta época del año y pueden ser visitadas a lo largo de ese mes sin costo alguno.