Por: César del Pardo
Las elecciones en Baja California Norte se pretende que la disputa sea entre neoliberales del PRI, PAN y el nuevo Prian o sea Morena, sin embargo por ahí se perfila un posible conglomerado popular bajo las siglas de otros no menos peores.
Ahí se disputarán la gubernatura, cinco alcaldías y 13 diputaciones locales; le PRI sin sobresaltos ya tiene sus candidatos, un agotado PAN hecha manos de sus complicidades de poder y sus grupos de intereses a efecto de mantener su racha victoriosa desde que en 1989 gano la gubernatura Ernesto Ruffo Appel. Morena le entra como favorito no sin antes aplastar a toda oposición interna y básicamente a los grupos populares cuya expresión y experiencia es una amenaza natural al proyecto neoliberal morenista.
La crisis real en BCN y el sueño de lo imposible
La Inversión extranjera directa (IED) en BCN siempre a fluctuando en los primeros lugares en las entidades del país; Baja California fue la séptima entidad con mayor inversión extranjera directa en el país con un ingreso de 1440 millones de dólares durante el 2017, según Rubén Roa Martínez, Secretario Técnico del Consejo de Desarrollo de Tijuana quien agregó que el 50% de esa inversión ha ido a la industria manufacturera.
Estados Unidos es el país que más ha invertido en el estado con el 76.4%, le sigue Japón con el 6.9%, Corea del Sur con el 5.8%, España con el 5.2% e Irlanda con el 1.2% que son el 95.5% de las inversiones en Baja California que a su vez representa el 4.9% del total del país.
La industria manufacturera es la potencia de la inversión en el estado con el 50%, mientras que el 21% se reparte entre los transportes y almacenamiento y un 12% para servicios financieros como los giros con mayor dinero inyectado en la región.
Un estudio actualizado del decil en BCN sin duda nos dará una gráfica escandalosa de la concentración de los ingresos; en la frontera norte las familias más ricas —en el decil más alto— concentraban 62% del Ingreso Corriente Total (ICT), mientras que las familias del decil más bajo poseían tan sólo 0.4% del ICT (Del Castillo, 2015)
Con una economía dependiente; la industria generó un crecimiento muy rápido y acelerado de empleos, pero una de las problemáticas, es que es una actividad que emplea a un alto porcentaje de la población con bajos salarios, y esto genera diferentes impactos sociales. A la segregación de la población de menores recursos en zonas alejadas de sus centros de empleo -por el encarecimiento del suelo- o viviendo en asentamientos irregulares, se suma la baja capacidad de ahorro del trabajador durante su vida laboral. Esta estructura económica de muy bajos salarios provoca que cuando la industria pierde el dinamismo de su economía, la gente pasa muy rápido a las estadísticas de pobreza, así un millón de personas viven en pobreza extrema, es decir el 25% de los 4 millones de habitantes.
En la vivienda BCN tiene alrededor de 250 mil viviendas abandonadas y más de 40 mil demandas de crédito hipotecario interpuestas en los juzgados locales y en otras entidades; la danza de las cifras las más inexactas son las del Infonavit para no alertar o deprimir la oferta de los créditos o bien una respuesta popular; lo cierto que está entre las entidades con mayor vivienda abandonada en el país; del 1 al 6.
Morena y las purgas
Los grupos populares al parecer les gana más la emoción y el deseo de lo que no es sino lo que quisieran que fuera y en base a eso pretenden hacer un polo cuya base programática sea coherente una supuesta Cuarta transformación. Nada más equivocado.
Veamos; hasta ahora una y otra vez Morena se ha desprendido de todas las expresiones grupales o personales que insinué teoría y barricada; es decir, el proyecto neoliberal de AMLO y su nuevo corporativismo de estado no le sirve, no le interesa ningún proyecto progresista ni corrientes dentro de Morena que pongan en riesgo no solo su programa conservador sino la propia hegemonía del caudillo; Así paso en Veracruz, en Sinaloa, Campeche y por supuesto en Baja California Norte y un largo etcetera.
¿Alguien puede pensar en serio que Morena o AMLO representan un cambio hacia el interés público, social y democrático?
No hay ningún cambio en la programación del presupuesto y su política económica que nos indiquen que hay una prioridad en un modelo económico propio y de soberanía nacional; la programación del presupuesto en el sector social solo corresponde a crear la estructura de Morena; 35 mil millones de pesos serán destinados a crear ese nuevo corporativismo operados por morenistas disfrazados de Servidores de la nación ¿En esta lógica puede importarle al caudillo la ausencia de 30 0 100 cuadros progresistas si con ese río de dinero puede contribuir eficazmente al triunfo electoral? Y sobre todo bajo los actores políticos que sin duda reflejan la real Cuarta Transformación cuyo símbolo inequívoco es Jaime Bonilla.
El abismo del fracaso ¿Qué hacer?
La magnitud expresada en el voto del pasado primero de junio será la magnitud de la reacción al engaño y la simulación; entonces las voces pondrán las cosas como son; la violencia y la inseguridad en el país es una estrategia imperial contra los países periféricos a efecto de menguar la respuesta y envilecer las sociedades, esto permite de manera contundente la sobreexplotación de las riquezas naturales; las causas reales del hartazgo están intactas; pobreza, desigual distribución del ingreso, embates a las conquistas sociales, extremando el abismo entre la opulencia y la pobreza.
La dinámica de la descomposición lamentablemente no terminara en nada bueno; ya no puede haber ningún cambio en nuestro país sin la participación contundente de las masas; jamás un ejército regular podrá resolver una descomposición como la que vivimos en el país, sino todo lo contrario, será usado contra las rebeliones; pero de que vamos al abismo del fracaso no hay la menor duda.
La apuesta de la política ambigua de AMLO es la institucionalización de la descomposición a efecto de administrarla, pero de ahí no pasara; si seguimos adecuándonos al “cambio” nos iremos juntos a los falsos jinetes al baúl de la historia; las cosas no son fáciles en el país, pero las contradicciones entre el capital y el trabajo nos obligan a dar la lucha reivindicativa pero acompañada de la consigna histórico político; sin medias tintas, debemos ser los próximos Ernest Everhard de su Talón de Hierro.
La tempestad ya está entre nosotros; los obreros de Matamoros, los derechohabientes del país, los RCP, el movimiento ecologista de Morelos, contra el Tren Maya, son muestras claras que el pueblo configurara una nueva fuerza política; vayamos a las fábricas en Mexicali, Tijuana, Ensenada, agitemos las demandas de los obreros, apoyemos a los jornaleros de San Quintín, a los olvidados, a los derechohabientes del Infonavit, al activismo en defensa del agua; y si vamos a ir a las elecciones podríamos hacerlo por la vía independiente o por la libre cuyo programa debe ser una veneración a las demandas de los explotados de la frontera norte: podríamos ser los pioneros de esta nueva etapa de la lucha clases; tomemos el camino correcto y ese es el compromiso histórico.
Refresquemos la esperanza y como diría Ernest Mandel en Nicaragua “La práctica de los socialistas y comunistas debe ser totalmente conforme a sus principios. No debemos justificar ninguna práctica alienadora u opresiva. Debemos en la práctica realizar lo que Marx llamaba imperativo categórico de luchar por derrotar las condiciones en las cuales los seres humanos son enajenados y humillados. Si nuestra práctica es conforme a ese imperativo, el socialismo recuperará una formidable fuerza y legitimidad política que lo hará invencible.”.
Forjemos una alternativa popular, sin camisas de fuerzas ni confusiones.