* En el marco de la Jornada Nacional de Salud, el Banco de Leche humana del Hospital General de Tijuana, informó que durante junio atendieron con este tipo de alimentación a 66 bebés con 45 donaciones, pero se requiere el doble de este alimento.
Semanario Balún Canán/ TIJUANA, B. C., (SBC).- Recién nacidos prematuros o que fueron atendidos quirúrgicamente, sobre todo de problemas abdominales, son los principales beneficiados de la donación de leche materna que recibe el Banco de Leche Humana del Hospital General de Tijuana.
Como parte de la Jornada Nacional de Salud, Julieta Pacheco, coordinadora del Banco de Leche humana, hizo un llamado a las mujeres para que después de satisfacer las necesidades alimenticias de sus hijos, donen leche a bebés que se mantienen en tratamiento en el área pediátrica.
La especialista explicó que una parte de estos pacientes reciben la leche de sus madres, misma que también es recibida en el Banco de Leche para su procesamiento, pero, aun así, siempre es necesaria para los bebés cuyas madres no tienen esa oportunidad.
Puso como ejemplo que, durante junio pasado, atendieron con este tipo de alimentación a 66 bebés con 45 donaciones y aproximadamente 8.5 litros del alimento, pero se requiere el doble para satisfacer la demanda en su totalidad.
Las interesadas en donar pueden acudir directamente al Banco de Leche del Hospital General de Tijuana, para una entrevista, en la que se analizan las condiciones de salud de la donante, se les toma muestra de sangre para verificar que no haya enfermedades infecciosas, incluidas sífilis, VIH, etc.
Si la mamá está sana y los exámenes resultan normales, entonces se les recibe la leche, misma que debe ser recolectada en un frasco con ciertas características, que el mismo hospital entrega: estéril, de cristal y con tapa de plástico.
Ellas los utilizan para depositar su leche, rotulado con hora y fecha, y debe mantenerse en el congelador. Durante el traslado de casa al banco de Leche, los frascos deben portarse en una hilera con congelante o hielo, para que se mantenga el producto en buenas condiciones.
Antes de suministrarse a los bebés, la leche se pasteuriza, una vez libre de bacterias o virus, se realiza un control de calidad, para verificar la calidad de la pasteurización. Luego se dosifica a los lactantes que se encuentran en el hospital, ya sea terapia intensiva o intermedia, donde se da preferencia a los bebés prematuros o con problema intestinal, que no se le formó bien el intestino o quedó fuera de la cavidad abdominal.
Si la mamá acude a donar leche para su bebé hospitalizado, entonces no se pasteuriza, solo se conserva y dosifica.
Las personas pueden acudir a entregar la leche de lunes a viernes, de siete de la mañana a las tres de la tarde y sábados y domingos, de siete de la mañana a siete de la tarde.