ENSENADA.- Las más de 180 especies marinas comercialmente aprovechables en Baja California han forjado la tradición gastronómica de la región, misma que se convirtió en años recientes en un poderoso atractivo turístico, indicó la titular de la Secretaría de Pesca y Acuacultura (SEPESCA), Alma Rosa García Juárez.
La funcionaria destacó que la cultura culinaria no es un ingrediente nuevo, sino que se ha venido forjando desde los primeros pobladores, cuyo más claro vestigio puede encontrarse en los “concheros”, mismos que marcan el arraigo de las comunidades y la forma en que se alimentaban.
“Los moluscos han sido una fuente de alimento que, además de su sabor sublime, también son parte de la cultura y riqueza regional, y han sido la base de crecimiento de los pueblos costeros”, reiteró.
La titular de SEPESCA relató que los “concheros”, a lo largo de la península, han dejado como testimonio el importante papel que han tenido los moluscos endémicos en la historia de nuestro Estado.
Estas especies, además ser fuente de alimento, pudieron haber sido objeto de trueque, ornamento, ritual y herramienta para diversas actividades que realizaban los antiguos pobladores, debido a su fácil acceso y recolección.
Detalló que los mejillones o choros, abulones, lapas, almejas y caracoles, hoy preciados como manjares por los consumidores, eran extraídos con técnicas sencillas, como la simple colecta superficial, hasta el uso de artefactos elaborados, para desprenderlos de las rocas.
Durante el siglo pasado, recordó, la pesquería de moluscos ayudó al crecimiento de pequeños poblados a lo largo de la península, ya que su principal fuente de ingresos provenía de la captura y procesamiento de estos productos.
El abulón, dijo, es un molusco apreciado por su carne; pero su concha tuvo un auge en la fabricación de artesanías, con un mayor precio en el mercado internacional en la década de los 70.
García Juárez precisó que en Baja California existen 87 especies de peces; 45 de elasmobranquios como tiburones y rayas; 6 equinodermos como el erizo o el pepino; 10 de crustáceos como camarón, jaiba o cangrejos; 3 cefalópodos como los pulpos o calamares; y más de 29 especies de bivalvos y gasterópodos.