* El W-8 y el W-9 son esenciales para la presentación de impuestos, cumplen diferentes propósitos y están diseñados para distintas categorías de contribuyentes
Semanario Balún Canán/ TIJUANA, B. C., (SBC).– Para individuos y empresas involucrados en diversas transacciones financieras, los formularios fiscales desempeñan un papel crucial en garantizar una correcta tributación y el cumplimiento de las regulaciones del IRS (Servicio de Impuestos Internos de EE. UU.).
Josh Maxwell, socio director de la firma de abogados de derecho fiscal, Hone Maxwell LLP, manifestó que 2 de estos formularios que se utilizan con frecuencia son el formulario W-8 y el formulario W-9.
Indicó que si bien ambos formularios son esenciales para la presentación de impuestos, cumplen diferentes propósitos y están diseñados para distintas categorías de contribuyentes.
“Una de las principales diferencias entre el formulario W-8 y el formulario W-9 es el estatus de residencia fiscal del contribuyente. El formulario W-9 es utilizado por contribuyentes estadounidenses para declarar su residencia fiscal en EE. UU., mientras que los formularios W-8 son empleados por personas y entidades extranjeras para confirmar que no tienen residencia fiscal en EE. UU. No hay elección entre los formularios; si se cumple con los requisitos para completar un formulario W-9, se debe presentar este formulario incluso si se tiene doble ciudadanía o residencia fiscal en otro país”, explicó.
Mencionó que el formulario W-9 se utiliza principalmente para identificar a contribuyentes estadounidenses que son ciudadanos estadounidenses o extranjeros residentes en EE. UU. y que el mismo solicita el nombre, dirección y número de identificación del contribuyente (TIN), como el Número de Seguro Social (SSN) o el Número de Identificación del Empleador (EIN).
Las empresas y entidades a menudo solicitan este formulario a individuos y proveedores para asegurar una correcta presentación de los pagos realizados a ellos, expresó.
Señaló que la serie de formularios W-8 consta de varios formularios, incluidos W-8BEN, W-8BEN-E, W-8IMY y W-8EXP. Estos formularios se utilizan para certificar el estatus extranjero de personas y entidades que no son contribuyentes estadounidenses. Los formularios W-8 también sirven como documentación para determinar si la entidad está sujeta a la presentación de FATCA (Ley de Cumplimiento Fiscal de Cuentas Extranjeras).
“La forma W-9 es necesaria para todos los contribuyentes estadounidenses. Esto es independiente de si el contribuyente tiene doble ciudadanía. El W-8 es para no estadounidenses, no importa si se tiene la doble ciudadanía. Por lo tanto, si el contribuyente es estadounidense, el W-9 debe estar firmado y no hay otra opción. Firmar un W-8 podría considerarse fraudulento si el contribuyente sabe que es un estadounidense”, puntualizó.
El especialista aclaró que las empresas deben firmar una versión más detallada del W-8, el W-8BEN-E. y que esto se debe a que para ser compatible con la Ley de Cumplimiento Fiscal de Cuentas Extranjeras (FACTA), la institución financiera extranjera también debe certificar que los titulares de cuentas comerciales son compatibles con FATCA.
En conclusión, refirió que los estadounidenses firman la W-9 independientemente de su estado extranjero, y todos los demás firman la W-8.
“La complejidad viene del siguiente paso – el contribuyente debe asegurarse de que estén en cumplimiento con cuentas extranjeras antes de que su información sea reportada al IRS. Además, los extranjeros que abran cuentas en los EE. UU. deben asegurarse de tomar la posición apropiada del tratado en su W-8”, concluyó.