TIJUANA.- La Comisión Estatal de Servicios Públicos de Tijuana (CESPT), es uno de los organismos que busca reducir la brecha de género y promover la inclusión laboral, por lo cual, más de 350 puestos son ocupados por mujeres, de las cuales, el 80 por ciento son madres de familia.
En las distintas áreas de la paraestatal, encontramos a mujeres madres de familia, tal es el caso de la Lic. Amelia Cornejo, con una trayectoria de más de 25 años dentro del área financiera, donde actualmente se desempeña como subdirectora, una posición clave en la dependencia, pues el cuidado de las finanzas permite trabajar en apego a los principios de eficacia, eficiencia, calidad y economía, que se traduce en un mejor servicio para los usuarios.
También, Flor Gallardo, quien se ha desempeñado como coordinadora de Tratamiento de Aguas Residuales, coordinadora de Saneamiento y actualmente ocupa la Coordinación del Distrito Aldo Esquer, que comprende las zonas de Playas de Tijuana y del Centro, entre otras.
El director general de la CESPT, Víctor Daniel Amador Barragán, indicó que la participación de la mujer en puestos de mayor rango dentro del organismo, contribuye en la mejora de resultados, además de cambiar la percepción de que las mujeres no se pueden desempeñar en puestos operativos, en este caso, de saneamiento y agua potable.
Amador Barragán agradeció el esfuerzo de las madres de familia que combinan la actividad profesional y su vida personal.
Por su parte, Flor Gallardo reconoció que, al concluir la licenciatura en Ingeniería Bioquímica, en el Instituto Tecnológico de Tijuana, nunca se imaginó que llegaría a desempeñarse en distintos puestos dentro del organismo operador del agua, y añadió que ser mamá y profesional no ha sido un trabajo sencillo.
“Ha sido fascinante conocer las diferentes áreas de la CESPT, desde el saneamiento de las redes, las plantas tratadoras de aguas residuales, así como todos los trabajos que se requieren para dar continuidad al servicio de agua potable y alcantarillado en las ciudades de Tijuana y Playas de Rosarito”, expresó.
Al convertirse en mamá, tuvo que combinar su pasión profesional con el amor de madre, “debo coordinar los trabajos en campo hasta que concluyan, incluso en la madrugada, nos hemos adaptado en la familia, mis hijos conocen mi responsabilidad, aunque están muy pequeños aún, siempre están al pendiente de mi llegada a la casa”, comentó.
Por su parte, la licenciada Cornejo indicó que, durante su trayectoria en la paraestatal, ha podido compartir con su hijo del conocimiento y la experiencia que significa trabajar en un organismo con un objetivo tan noble, como lo es, la dotación de agua potable.
Para finalizar, Amador Barragán reconoció a todas las mamás que colaboran en la paraestatal, quienes día a día contribuyen para que el agua llegue a todas y todos en Tijuana y Playas de Rosarito, e hizo extensiva una felicitación a todas las madres de ambos municipios.
