MEXICALI.- La Comisión Estatal de Servicios Públicos de Mexicali (CESPM) promueve la conservación de los humedales, en el marco del Día Mundial de los Humedales, en observación a que la capital del Estado cuenta con la planta de tratamiento, humedal, bosque ecológico y parque fotovoltaico “Las Arenitas”, ubicado a las faldas del volcán Cerro Prieto.
Un humedal es un ecosistema desarrollado en un cuerpo de agua, formado natural o artificialmente, que genera alimento y protección para las diversas especies de flora y fauna, además de brindar a los seres humanos la posibilidad de un medio ambiente más limpio y saludable.
La planta de tratamiento en Mexicali cuenta con más de 603 hectáreas de superficie total; 120 están forestadas y un humedal que da albergue a diversas especies endémicas y migratorias, como diferentes tipos de aves migratorias, perritos de la pradera, coyotes, iguanas y serpientes, entre otras.
El concepto de humedal surgió durante la Convención de RAMSAR en 1971 en Irán. En Mexicali se cuenta con dos sitios RAMSAR: el primero contempla los remanentes del Río Colorado que incluyen las lagunas Xochimilco, Campestre y México, así como la Mesa de Andrade, la Laguna Salada y el Río Hardy; el segundo es el humedal del Delta del Río Colorado.
La planta de tratamiento de aguas residuales cubre y beneficia al 45 % de la población de Mexicali, con el tratamiento y desinfección de los volúmenes de aguas residuales que ingresan a la red de alcantarillado sanitario de la ciudad, lo que permite la reutilización de las mismas.
Más del 30% del agua en “Las Arenitas” sirve para recargar los niveles del Río Hardy, que habían bajado de forma dramática. Estos volúmenes de agua están dedicados para uso ambiental, un 22% se utiliza en el riego de cultivos de forrajes y mezquites, un poco más del 17% lo consume la industria local y el 2.94% se utiliza para el riego de áreas verdes.
La central fotovoltaica del complejo cubre parte del consumo de la planta de tratamiento con una producción de 500 Kilowatts, lo cual ha reducido sustancialmente el consumo de energía de la red eléctrica, con un beneficio ambiental equivalente al desplazamiento de 435 toneladas al año de gases que producen el efecto invernadero.