TIJUANA.- Baja California es un santuario para las personas migrantes, de acuerdo con las políticas derecho-humanistas implementadas por la Gobernadora Marina del Pilar Avila Olmeda, es así que de manera coordinada se reciben a las personas de nacionalidad venezolana, a quienes se les apoya y se les integra socialmente.
El titular de la Secretaría General de Gobierno (SGG), Catalino Zavala Márquez, explicó que por instrucción de la Gobernadora Avila Olmeda, se atendió de manera inmediata y coordinada el conato de disturbio en el Instituto Nacional de Migración (INAMI), para garantizar que se respeten sus derechos humanos, y se canalicen los respectivos trámites de las personas venezolanas.
Las 250 personas que estaban en el espacio de tránsito del INAMI, a la espera del trámite para poder acreditar su identidad y hacer valer su derecho al libre tránsito por México, se les ofreció asesoría, hacer llamadas, atención médica y alimentos, la Subsecretaría de Asuntos Migratorios (SAM), estuvo como observadora, velando que se cumplieran sus derechos.
El secretario Zavala precisó que se organizó una mesa de diálogo donde participó el INAMI, la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH), la SGG, así como una mujer y un hombre representantes del grupo de personas migrantes.
Durante el ejercicio, se les explicaron sus opciones, que incluyen asentarse en el Estado, retornar a su país de origen, o bien trasladarse a la Ciudad de México para comenzar con su proceso de solicitud de asilo en Estados Unidos.
El funcionario mencionó que el Gobierno Federal y Estatal, coordinan una política humanitaria en atención a las personas migrantes, con el apoyo de la Secretaría de Bienestar, para la habilitación de los albergues que sean necesarios.
El secretario explicó que, a las personas venezolanas, se les brinda la asesoría para que decidan si desean permanecer en México, o si desean retornar a otro lugar, algunos han optado por viajar en avión a la Ciudad de México, y ninguno ha sido deportado a Venezuela.
“En México la política migratoria siempre ha sido de recibir a los migrantes, Baja California es un santuario migrante, bajo la política derecho-humanista de la Gobernadora, y es parte de los protocolos internacionales”, explicó el secretario Zavala.
Finalmente, añadió que existe coordinación entre los tres órdenes de gobierno para brindar la atención oportuna, tal es el caso de la habilitación de la Unidad Deportiva Reforma como albergue, de manera preventiva en caso de que sea requerido.