Además de la falta de personal de la Secretaría del Trabajo y Previsión Social del Gobierno Federal, uno de los problemas más graves es la corrupción que existe entre los dueños de las minas y los inspectores, que acuerdan entre sí para dar el visto bueno a estos centros de extracción de carbón sin que se cumplan las normativas oficiales, según lo afirmó la diputada local, Lizbeth Ogazón.
La legisladora manifestó que dentro de estos actos de corrupción, los inspectores dan fe de la existencia del equipo de protección para los mineros, sin embargo este no es utilizado en la práctica ya que solo se puede encontrar en la mina los días que hay inspecciones.
“Aparte de que hay una falta de personal imperante en este tipo de instituciones a nivel federal, también hace falta que se hagan o se lleven a cabo las mismas inspecciones, omisiones sí las hay, a veces aplican las normativas y dicen que se cumplen con las normas oficiales, cuando en realidad no”, afirmó la diputada local.
Se trata de corresponsabilidad Lizbeth Ogazón, diputada local por el partido Morena, aseguró que se trata de un tema de corresponsabilidad, ya que al acudir a los pozos de extracción, no se cuenta con el material necesario para la protección de los trabajadores, el cual solo puede encontrarse los días en que los inspectores realizan una inspección.
“Cuando van a la inspección, casualmente ahí está el equipo, y ellos justifican que el equipo no está en uso porque el trabajador no quiere, que porque el trabajador batalla” Agregó que en estos casos se advierte que existe una complicidad entre los dueños de la mina y quienes realizan las inspecciones, al momento en que se certifica que se cumple con la normativa federal, aunque en la práctica no se lleva a cabo lo que marca la ley.
