Desde que Rusia fue incapaz de controlar Kiev, la capital de Ucrania, las fuerzas de Moscú se desplegaron hacia el Este del país, donde los combates se han recrudecido. Las tropas rusas están haciendo uso de toda su fuerza militar, de acuerdo con las declaraciones de la viceministra de Defensa ucraniana, Ganna Malyar.
Serguéi Gaidai, gobernador de la provincia de Lugansk, que junto a la de Donetsk conforman la región del Donbás -en el Este de Ucrania-, tampoco se mostró optimista con los combates. “La tarea es extremadamente difícil en la región de Lugansk porque hemos tenido tres meses de ataques constantes, bombardeos constantes, y ahora todas las fuerzas rusas están desplegadas aquí, y tenemos que contener esta horda”, dijo el jueves en un vídeo publicado en Telegram.
De acuerdo con sus comentarios, muchas infraestructuras militares ucranianas han sido destruidas.”Poco a poco nuestros chicos (soldados ucranianos) se están retirando a posiciones más fortificadas. Es muy duro (para ellos). Extremadamente difícil. Pero están aguantando”, añadió. Las tropas rusas centran su ofensiva en el este de Ucrania después de que no lograron hacerse con Kiev.
Los separatistas prorrusos ya controlaban una parte del este del territorio desde 2014. Preguntada por la situación en Kiev, Malyar consideró que la amenaza seguía existiendo.”Porque destruir Kiev y derrocar al gobierno ucraniano es la forma más rápida de conquistar Ucrania. Así que tenemos que vivir con la idea de que esta amenaza siempre estará con nosotros”, subrayó.
Desde el Foro económico de Davos, el alcalde de la capital, Vitali Klitschko, también señaló que no podía “ofrecer garantías de seguridad” a los habitantes que decidían regresar a la ciudad.