Rusia dijo haber destruido un sistema de misiles antiaéreos S-300 del Ejército ucraniano en la región de Donetsk, por donde transcurre la línea del frente en el Donbás.
La batería se encontraría cerca de la localidad de Kramatorsk, principal bastión militar ucraniano en el Donbás, informó Ígor Konashénkov, portavoz el Ministerio de Defensa, en su parte militar vespertino.
A mediados de abril el general ruso ya informó de la destrucción de un sistema S-300 suministrado a Ucrania por un país europeo, aunque las autoridades eslovacas negaron que fuera la batería que ellos entregaron a Kiev.
Rusia ha protestado formalmente ante Estados Unidos (EU) por el suministro de una “cifra enorme” de armamento al Ejército ucraniano al considerar que esto únicamente alargará la actual campaña militar rusa.
Además, Moscú ha condenado el envío a Kiev por parte de Washington y otros países europeos de helicópteros y armamento pesado de fabricación rusa o soviética sin su permiso.
El presidente ruso, Vladímir Putin, aseguró hoy que los objetivos marcados por el Kremlin en la “operación militar especial” se cumplirán con toda seguridad y advirtió con “ataques relámpagos” en caso de injerencia extranjera estratégica en Ucrania.
Ucrania prevé “semanas difíciles”
El ministro de Defensa de Ucrania, Oleksiy Reznikov, afirmó que prevé “semanas extremadamente difíciles” en la guerra contra Rusia, que se apresta a lanzar una “ofensiva de gran envergadura”.
“Rusia ya ha concentrado fuerzas para una ofensiva de gran envergadura en el Este de Ucrania” y tratará de “ocasionar tantos daños como le sea posible”, provocando “destrucción y dolorosas pérdidas”, indicó.
Además, Reznikov dijo a los ucranianos que “en los próximos días necesitaremos toda nuestra resiliencia y nuestra extraordinaria unidad”.