El presidente de la Liga MX, Mikel Arriola, ha lanzado el mensaje más directo y fuerte de todas las declaraciones que ha hecho en los últimos días en contra de la violencia y los llamados grupos de animación: “Es el principio del fin de las barras” y —sobre todo—, según dijo, de quienes las utilizan para cometer delitos.
Con la obligada credencialización de todos los miembros de las barras, dijo el directivo, “lo que estamos haciendo es quitarles el escudo con el cual operaban los miembros criminales de los grupos de animación, que los utilizaban como un disfraz. En el momento en que el anonimato se va, empezamos a verdaderamente tener control de estos grupos”.
De igual manera, Arriola señaló que —en el caso del Fan ID— “fue la solución en Inglaterra y, además de ser un elemento de seguridad, en el futuro va a ser de confort para los aficionados, para obtener beneficios, pero lo primero es seguir garantizando la seguridad de todos los asistentes”.
El pleno del Senado de la República aprobó un acuerdo de la Junta de Coordinación Política para reunirse con el presidente de la Liga MX y dialogar sobre los hechos de violencia ocurridos el 5 de marzo en el estadio La Corregidora.
