Moderna inicia los ensayos de una dosis de refuerzo de la vacuna contra el COVID-19 dirigida específicamente a la variante ómicron en adultos saludables.
La compañía anunció el miércoles que administró una dosis al primer participante. Hace unos días, la farmacéutica Pfizer dio inicio a un estudio similar de sus propias dosis con una fórmula diferente.
De momento se desconoce si las autoridades mundiales de salud ordenarán un cambio a la receta de la vacuna a raíz de la altamente contagiosa variante ómicron. Las vacunas originales aún ofrecen una buena protección contra la muerte o síntomas graves de la enfermedad. Estudios en Estados Unidos y en otras partes del mundo revelan que una dosis de refuerzo aumenta esa protección y mejora la probabilidad de evitar incluso una infección más leve.
Moderna resaltó un pequeño estudio publicado en la revista New England Journal of Medicine el miércoles, el cual mostraba que los anticuerpos capaces de atacar a ómicron persistían durante seis meses después de una dosis de refuerzo, aunque los niveles disminuían.
El nuevo estudio de Moderna incluirá a unas 600 personas que ya han recibido las dos dosis de la vacuna de la compañía o dos dosis más un refuerzo. Todos los voluntarios recibirán una dosis de la versión experimental dirigida a ómicron.