Según un análisis de la agencia británica de seguridad sanitaria dado a conocer este jueves, los enfermos infectados con la variante ómicron del COVID-19 tienen hasta un 70% menos de riesgo de ser hospitalizados, en comparación con la variante delta.
El trabajo, en línea con dos estudios británicos publicados ayer miércoles, sostiene que un individuo contagiado con ómicron posee “entre un 50% y un 70% menos de probabilidades de ser ingresado en un hospital” que por la variante delta.
No obstante, la agencia británica es muy cautelosa debido al bajo número de casos de pacientes hospitalizados con esta nueva variante.