Un juez impuso este miércoles prisión preventiva al exdirector de Pemex, Emilio Lozoya (2012-2016), acusado de recibir sobornos de la constructora brasileña Odebrecht, tras más de un año enfrentando el proceso judicial en libertad.
El Consejo de la Judicatura Federal (CJF) informó que la Fiscalía General de la República pidió la medida cautelar porque Lozoya ya no cumple con el llamado criterio de oportunidad, el cual otorga beneficios procesales a cambio de colaborar con la Justicia.
El exdirector de Pemex se declaró “inocente” y propuso un “acuerdo para reparar el daño”, pero el juez Artemio Zúñiga aceptó la prisión preventiva ante el riesgo de fuga del acusado.
La medida fue apoyada por la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF) del Gobierno federal y por la actual dirección de Pemex, que participan como acusación en el caso.
Lozoya, director de la petrolera durante el Gobierno de Enrique Peña Nieto, fue capturado el año pasado en España y extraditado a México, donde cerró un acuerdo con la Fiscalía vigente hasta hoy por el cual inculpó a otros políticos a cambio de no pisar la cárcel.
Más temprano este miércoles, el juez pospuso un mes más la audiencia para cerrar la investigación y decidir la fecha del juicio, la cual tendrá lugar el 3 de diciembre.
La defensa de Lozoya había pedido posponerla durante dos meses, mientras la Fiscalía quería cerrar de una vez la investigación e ir a juicio cuanto antes.
Las acusaciones contra Emilio Lozoya
Las autoridades lo acusan de haber recibido cerca de 10.5 millones de dólares en sobornos de la constructora Oderecht a cambio de contratos públicos de Pemex.
Para librar la cárcel, el exfuncionario había acusado a Peña Nieto y a su secretario de Hacienda, Luis Videgaray, de haber usado esos sobornos para la campaña electoral de 2012 y para comprar a legisladores de la oposición para que aprobaran la reforma energética de 2013.
El cambio de parecer de la Fiscalía llega después de que el mes pasado el exfuncionario fuera captado comiendo en un lujoso restaurante de la capital, lo que provocó enorme indignación en el país e incluso fue condenado por el presidente Andrés Manuel López Obrador.
Además del caso Odebrecht, Lozoya está imputado por haber comprado a sobreprecio cuando era director de Pemex una planta de fertilizantes inservible a la empresa Altos Hornos de México (AHMSA) a cambio de sobornos.