En previsión de que los expertos en vacunas le darán luz verde, el gobierno del presidente Joe Biden está preparando y enviando millones de vacunas contra el COVID-19 para niños de cinco a 11 años, informó el lunes la Casa Blanca. Las primeras dosis podrían ser aplicadas a mediados de la semana.
“No estamos esperando en lo que respecta a las operaciones y la logística”, dijo Jeff Zients, coordinador de la respuesta de la Casa Blanca contra el COVID-19.
Al vacunar a los niños, Estados Unidos espera evitar otra ola de coronavirus durante los meses de clima frío, cuando la gente pasa más tiempo bajo techo y las enfermedades respiratorias pueden propagarse con mayor facilidad. Los casos han estado disminuyendo desde hace semanas, pero el virus ha demostrado su capacidad de reaparecer en repetidas ocasiones y las mutaciones más contagiosas son una amenaza persistente.
Un grupo consultivo especial de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de Estados Unidos (CDC, por sus siglas en inglés) se reunirá el martes para estudiar recomendaciones detalladas acerca de la administración de la vacuna de Pfizer-BioNTech a los niños más pequeños. La Administración de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos (FDA, por sus siglas en inglés) ya autorizó las inyecciones, con las cuales se administra aproximadamente una tercera parte de la vacuna que se aplica a los adultos.
Después de que los asesores de los CDC hagan sus recomendaciones, la directora de la agencia, la doctora Rochelle Walensky, dará la autorización final.
Zients dijo que el gobierno tiene cantidad suficiente de la vacuna de Pfizer para todos los 28 millones de niños en el grupo de edad de cinco a 11 años. “Estamos muy bien en cuanto al suministro”, declaró durante la sesión informativa sobre el coronavirus en la Casa Blanca.
Se espera que la campaña de vacunación infantil comience a finales de esta semana y esté en pleno apogeo la semana que viene.