Un jornalero mexicano, Fausto Ramírez Plazas, murió el jueves en un hospital canadiense poco después de contraer coronavirus mientras cumplía la obligada cuarentena de 14 días en Canadá, denunció este viernes una organización de defensa de los derechos de temporales extranjeros.
“¿Cuántos trabajadores tienen que morir antes de que Justin Trudeau actúe y les dé un estatus migratorio?”
Ramírez Plazas es el quinto jornalero que muere este año en Canadá de COVID-19 tras llegar al país para trabajar en el sector agrícola. Cuatro de ellos, incluido Ramírez Plazas, fallecieron durante el periodo de cuarentena.
Según la Alianza de Trabajadores Migrantes por un Cambio de Canadá (MWAC, por sus siglas en inglés), Ramírez Plazas llegó a Canadá el 22 de abril tras dar negativo en una prueba de COVID-19 realizada antes de salir desde México.
A su llegada a Canadá, las autoridades canadienses le practicaron un nuevo test en el aeropuerto internacional de Toronto, que también tuvo un resultado negativo.
De acuerdo con las normas impuestas por Canadá a todas las personas que llegan desde el extranjero, Ramírez Plazas inició una cuarentena de 14 días inmediatamente después de su llegada a Toronto.
El jornalero mexicano fue alojado por Procyk Farms, la explotación agraria que le había contratado, en una habitación junto con otros dos compañeros; diez días después, una prueba obligatoria de COVID-19 reveló que los tres habían contraído la enfermedad.
“Sólo un estatus migratorio permanente dará a los trabajadores poder para protegerse de pésimas condiciones de trabajo y del COVID”
Luisa Ortiz, portavoz de MWAC, señaló en un comunicado que “claramente, lo que el Gobierno está haciendo para supuestamente proteger a los trabajadores no es suficiente. Sólo un estatus migratorio permanente dará a los trabajadores poder para protegerse de pésimas condiciones de trabajo y del COVID”.
“Estos trabajadores están muriendo durante cuarentenas ordenadas por el Gobierno federal, lo que significa que están muriendo bajo la vigilancia del Gobierno federal. ¿Cuántos trabajadores tienen que morir antes de que Justin Trudeau actúe y les dé un estatus migratorio?”, añadió Ortiz.
MWAC y otras organizaciones solicitan desde hace años que los decenas de miles de trabajadores temporales, muchos de ellos latinoamericanos, que cada año acuden a Canadá para trabajar en explotaciones agrarias, puedan obtener la residencia permanente.
Los jornaleros han denunciado que son hacinados en viviendas y forzados a trabajar en turnos de hasta 14 horas al día. La situación ha empeorado desde el inicio de la pandemia.