Astroland, la misma empresa que ha recreado las condiciones de la vida en Marte para turistas espaciales en una cueva de Cantabria, ha fabricado la casa del futuro, una vivienda inspirada en la era “post covid”, sostenible, inteligente, flexible y personalizable.
La empresa cántabra ha mostrado este martes el prototipo de su “CyberHut” en el Parque Científico y Tecnológico de Cantabria (PCTCAN), en Santander, donde tiene su sede y ahora su objetivo es empezar a fabricar en serie estas viviendas “de la nueva era”, con la ayuda de inversores interesados en alquilarlas.
La primera “CyberHut” ha sido inaugurada por el presidente de Cantabria, Miguel Ángel Revilla, y el consejero de Industria, Javier López Marcano, quienes han destacado que el prototipo y sus componentes son de fabricación cántabra y la capacidad de la “starup” para aprovechar las oportunidades que ofrece la pandemia.
“Si alguna vez pude imaginar el futuro, hoy lo he visto”, ha dicho Revilla, que, después de visitarla, ha afirmado que la vivienda tiene 50 metros pero “el potencial de 250 metros” y se ha mostrado impresionado por su tecnología y por las posibilidades que ofrece, desde el control de la salud al cultivo de alimentos.
Según el CEO de Astroland, David Ceballos, el proyecto surgió durante la pandemia, de la idea de emplear los últimos avances tecnológicos para responder a las necesidades de la era postcovid y es “el principio de una nueva forma de relacionarse con la vivienda”.
Los materiales con lo que está fabricada, que no construida, ha precisado el presidente de la empresa, Francisco Ordóñez, la protegen de cualquier contaminación ambiental y es capaz de producir incluso más energía de la que necesita para el autoconsumo.
Todo se recicla, hasta las heces y la orina, que son reutilizables y quienes vivan en ella podrán plantar verduras, porque cuenta con un espacio para el cultivo hidropónico.
Los espacios son modulares, con paneles que se pueden desplazar según las necesidades de cada momento, de forma que en 50 metros cabe una cocina, un bar, un gimnasio, un dormitorio, un salón, un baño, una estación de salud y una zona de trabajo, ideal también para jugar a vídeojuegos.
Una vez fabricado el prototipo, el reto de Astroland es estandarizar su “Cyberhut” y que pueda estar a disposición de quienes quieran vivir en ella en cualquier parte del mundo.
Y el alquiler no sería más caro que el de una vivienda media asequible, según la empresa.
Marcano ha recordado la colaboración del Gobierno de Cantabria con Astroland desde su creación, con un préstamo participativo de 250.000 euros, a través de la sociedad pública de Sodercan.
Para este proyecto le ha otorgado una ayuda de 15.000 euros y además el PCTCAN le ha cedido el uso del suelo.
El consejero ha alabado la “capacidad y el ingenio” de los empresarios cántabros para afrontar nuevos retos y ha augurado un futuro “absolutamente esperanzador” para Astroland con este proyecto “para soñadores y visionarios” en el que se han implicado más de 200 personas.Ç
