Con los monstruos no hay que tener miramientos, según Carmen Leñero: “Están para ser derrotados o, mejor aún, domesticados; quien lo logra, se vuelve poderoso. Uno de nuestros poderes es la risa; hay que reírse de ellos y están acabados”.
Tal consejo de la escritora, compositora y cantante tuvo lugar con motivo de la reedición de su libro Monstruos mexicanos, presentado ayer miércoles con una charla virtual en la que la autora contestó de manera remota a las inquietudes y preguntas de diversos niños sobre ese apasionante tema.
Editado por la coordinación Alas y Raíces de la Secretaría de Cultura (SC) federal, el libro está destinado al público infantil y en él se recoge una selección de 10 de los monstruos más comunes de los que se habla en diversas partes de México incluso desde épocas anteriores a la Conquista.
De acuerdo con Carmen Leñero (Ciudad de México, 1959), tales criaturas, en las que muchas veces se conjuntan elementos animales y humanos, no son reales, aunque sí verdaderas, pues son la manera en la que históricamente la gente ha tratado de explicar aquello que no entiende.
“Los monstruos han existido en México desde antes de la llegada de los conquistadores, después de que nos conquistaron y luego cuando nos independizamos; siguen vivos y se mantienen presentes en la vida de las personas, en su imaginario, sobre todo cuando ocurren situaciones incomprensibles”, explicó.