Con una red de empresas fachadas supuestas vendedoras de tequila, el Cártel Jalisco Nueva Generación tejió una red de lavado de dinero que permitió a la Unidad de Inteligencia Financiera y al gobierno estadunidense detectar movimientos por más de 21 mil millones de pesos y más de 659 millones de dólares, y así bloquear mil 939 cuentas bancarias en las últimas 48 horas.
De acuerdo a información confirmada por MILENIO, el operativo fue denominado “Agave Azul” por estas empresas fachada que extendieron sus movimientos en al menos 12 entidades federativas: Jalisco, la CDMX, Michoacán, el Estado de México, Baja California, Guanajuato, Nuevo León, Veracruz, Nayarit, Sinaloa, Querétaro y Colima.
Así, en colaboración con las áreas de seguridad nacional y la DEA, se bloquearon cuentas de 167 empresas y dos fideicomisos, y de mil 770 personas que incluyen a líderes del grupo criminal, operadores financieros, familiares, abogados y hasta servidores públicos que permitieron fortalecer esta red de corrupción.
Lo que representa el golpe más importante a la estructura financiera de un grupo del crimen organizado en esta administración.
El sistema financiero y las labores de inteligencia detectaron manejos en moneda nacional con dos mil 571 operaciones inusuales por un monto de 2 mil 951 millones de pesos; 38 mil 459 reportes de operaciones relevantes por más de 11 mil 478 millones de pesos; transferencias internacionales que generaron ocho mil 424 reportes por 7 mil 216 millones de pesos.
Mientras que en dólares en efectivo localizaron movimientos de dos mil 102 reportes por un total de 2 millones 955 mil dólares americanos, así como seis mil 507 transferencias interbancarias por 657 millones de pesos.
“Dicho operativo es el resultado del trabajo conjunto que realizaron las instituciones que integran el Gabinete de Seguridad, mismas que durante varios meses proporcionaron a la UIF informes de inteligencia respecto de los principales líderes, operadores financieros, familiares, empresas, abogados, así como de diversos servidores públicos que operan redes de corrupción que han favorecido las actividades ilícitas de dicho grupo de la delincuencia organizada.
“En el mismo sentido, la UIF trabajó de manera coordinada con la Administración para el Control de Drogas (DEA) en la definición de los objetivos de dicho operativo, con lo que se logró ubicar a un gran número de integrantes de dicho grupo criminal, así como a sus mayores operadores financieros y empresas utilizadas en el blanqueo de capitales”, indica el comunicado.
La Unidad de Inteligencia Financiera recalcó que este tipo de acciones forman parte de los ejes centrales de esta administración y de la nueva estrategia para combatir a las organizaciones criminales que operan en el país desde labores de inteligencia que permiten “mermar su capacidad económica y limitar su margen de operación dentro del sistema financiero”.