* Para enfrentar crisis en Baja California, es necesario modificar las participaciones federales que llegan al Estado y la focalización del apoyo debe ser a todos los sectores productivos: Marco Estudillo Bernal
Ensenada, B.C (SBC).- Los planes impulsados por los gobiernos federal y estatal para enfrentar la crisis económica derivada del Coronavirus Covid-19, deben ampliar su enfoque para incidir no nada más en los micro y pequeños empresarios y emprendedores, sino en la mediana empresa que genera miles de fuentes de empelo en Baja California, argumentó Marco Estudillo Bernal, presidente del Consejo Consultivo Económico de Ensenada, Consulten.
El nivel de la circunstancia, el tamaño de la crisis económica que estamos viviendo, dijo, requiere necesariamente de una respuesta y un plan directamente proporcional, y en este caso es imperativo que el gobierno federal direccione recursos de proyectos que tenía previstos como el Tren Maya, Dos Boca, el corredor Transísmico, del programa Jóvenes Construyendo el Futuro o del Aeropuerto para CDMX, para la inversión en todos los estados, incluido Baja California.
Estudillo Bernal reconoció que la actual administración estatal, recibió finanzas poco sanas y por lo tanto no está preparado para enfrentar solo la contingencia económica derivada de la de salud, por lo que debe haber un frente común entre el gobierno estatal, el sector empresarial en su conjunto, los trabajadores, las organizaciones civiles y la sociedad en general, para buscar el apoyo del gobierno federal.
Agregó que desde el centro del país, tiene que existir la visión de estado que permita reorganizar el uso de las participaciones federales, para que las entidades puedan acceder a ellas de manera más proporcional con su aportación, en donde Baja California podría recibir un porcentaje más amplio para poder apoyar a los sectores productivos de la entidad.
Hoy se ocupa, dijo, involucrar al sistema financiero, ese que en el pasado fue beneficiado por ejemplo con el Fobaproa; es hora, sostuvo, de que se otorguen créditos públicos y privados a seis, doce y 18 meses para pagos de impuestos y servicios, incluidas nóminas; esa sería una gran ayuda, en un proyecto ganar – ganar.
El empresario adelantó que será insostenible para las micro, pequeñas, medianas y grandes empresas, sostener nóminas de manera indefinida, y el tamaño de la circunstancia prevé que la crisis durará muchos meses y se llevará años para volver a equilibrar las finanzas y la economía estatal.
En este sentido, argumentó que para evitar que se sigan perdiendo miles de empleos, será necesario un acuerdo entre gobierno, empleador y empleado, en donde cada parte aporte un porcentaje del salario, buscando no cancelarlo en tanto la crisis es sobre pasada.
Tenemos que ser previsores, subrayó, porque de no resolverse el tema del empleo, estaremos enfrentando además de una crisis de salud y económica, una crisis de inseguridad porque las familias buscarán sobrevivir a costa de lo que sea necesario.
Estudillo Bernal señaló que la dimensión de la crisis económica nacional, regional y local, debe de llevar un redireccionamiento del gasto público corriente para que se destine a inversión en las entidades federativas, tiene que haber una reducción de nómina injustificada, una reducción del costo del Congreso de la Unión y de los Congresos locales, una disminución del costo electoral, incluidos los recursos para los partidos políticos, con lo que se sumarían cantidades sustantivas para apoyar el plan de contingencia económica nacional.
Por ello, dijo, es fundamental implementar una estrategia integral, que involucre al gobierno en sus tres niveles, a patrones, trabajadores, sindicatos y sociedad en un acuerdo y frente común, que impida la pérdida de empleos, el cierre masivo de empresas y la caída precipitada de la economía y la forma de vida en Baja California.
Con el redireccionamiento de recursos, el gobierno estatal y local, dijo, podrá privilegiar la proveeduría local, el consumo regional para favorecer el flujo de efectivo en nuestra comunidad y con ello favorecer el empleo.
Consideramos, dijo, que ante el tamaño de la circunstancia, tenemos que ser todos generosos y encontrar una ruta que permita ampliar la estrategia fiscal federal, explorando un camino impositivo que amplíe la base gravable, en el momento en el que la circunstancia lo permita, pero que en porcentajes pequeños, permitan que la carga que hoy tienen quienes pagan impuestos, sea repartida más equitativamente.
Reconoció que los mecanismos, créditos y apoyos ofertados por el gobierno del estado, explicados por el Secretario Mario Escobedo Carignan, serán una herramienta para las micro y pequeñas empresas un sector muy definido de la economía, pero el apoyo debe de ser para todos los sectores económicos que generan empleo, bienestar y divisas en la entidad.
En la ruta para la recuperación, el gobierno deberá plantear esquemas que impulsen y motiven la inversión y generen mayor flujo reduciendo impuestos al consumo, por ejemplo, que serían de gran beneficio para todo el sector productivo y social de Baja California y tendrá que haber una batería importante de estímulos fiscales que favorezcan la inversión, la creación de mirco, pequeñas y medianas empresas y con ello, el repunte de empleos.
Además, debe haber un análisis profundo, transparente y abierto de la deuda estatal y municipal, para detectar y generar estrategia para esas cuentas impagables que periódicamente sangran al erario público, sin darle beneficios contundentes a la ciudadanía.
Puntualizó que el escenario que vivimos como sociedad en su conjunto, es totalmente nuevo, donde ni el gobierno, ni el sector empresarial ni la sociedad habíamos atravesado una circunstancia tan complicada, por lo que debe existir un ánimo de solidaridad y proactividad para encontrar los mejores caminos para superar la crisis y lograr la estabilidad integral de México lo antes posible.