* La idea principal de esta obra de teatro surgió después de entrevistar a niños de preescolar acerca de si sabían cómo regresar a casa en caso de encontrarse solos.
TIJUANA, B.C (SBC).- Un desafío para usar la memoria fue la puesta en escena “De camino a casa”, cuyo montaje se llevó a cabo en la Sala Federico Campbell del Centro Cultural Tijuana, organismo de la Secretaría de Cultura del Gobierno de México.
Dedicado al público infantil de entre 3 a 6 años, este espectáculo teatral tiene como objetivo enseñar a los niños y niñas a cómo ubicarse y reconocer los sitios que frecuentemente recorren con sus padres o con algún adulto para identificar el camino de regreso a casa.
“De camino a casa” fue dirigida por Michelle Guerra y Johabett Pino, del grupo Teatro en Espiral, con la colaboración creativa de Andrea Buzzetti, actor y dramaturgo italiano de la compañía La Baracca Testoni Ragazzi, quien hace poco presentó al público infantil la obra “Spot” también en el CECUT.
La protagonista de la obra, Jesalem Guillén Moreno, es egresada de la carrera de Teatro en la Facultad de Artes de la UABC campus Tijuana, lleva 5 años dedicándose al trabajo en el escenario y en 2019 comenzó a adentrarse en el teatro para niños.
La idea para esta obra surgió a partir de la inquietud de la directora de Teatro en Espiral, Michelle Guerra, por crear algo para este rango de edad en específico, en donde mediante la manipulación, construcción y deconstrucción de cajas que manipulaba la actriz pudiera recrear un puente, una palmera, la casa de los amigos del personaje, una torre de reloj, y ayudar así a los niños a regresar a casa en caso de extraviarse y no contar con la ayuda de adultos.
Tanto la directora como la actriz mencionaron que la idea principal de esta obra de teatro se originó después de haber visitado varios preescolares para preguntarle a los pequeños si tenían idea de cómo regresar a casa en caso de encontrarse solos y sin la guía paterna o de algún adulto.
A pesar de estar conscientes de que a los niños y niñas jamás se les debe dejar regresar solos al hogar, tanto Jesalem como Michelle consideran alarmante que algunos de los niños no supieran ubicar su entorno, por lo cual les pidieron dibujar un mapa para llegar a sus casas.
Resultó que varios niños no sabían el camino de regreso, sin embargo, otros ilustraron a detalle las instrucciones para localizar su domicilio y con base en esta experiencia plantearon la premisa de la obra, cuyo montaje resultó muy divertido y útil para el público infantil que siguió con atención el desarrollo de la historia.
Al finalizar el espectáculo, Jesalem Guillén invitó a los hijos e hijas de los padres presentes en la sala a subir al escenario para entregarles crayones y papel con los cuales debían dibujar las cosas que ellos observan de camino a casa, dinámica con la cual los pequeños se vieron muy entretenidos.